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Dar la bienvenida a un miembro de cuatro patas a la familia siempre es un momento emocionante, ¡pero existen diferencias entre adoptar un perro adulto y tener un cachorro!
Un perro mayor puede haber pasado bastante tiempo en una casa anterior o viviendo en un refugio o en una casa de acogida, así que puede tardar un poco en acostumbrarse a su nuevo entorno y vuestras rutinas.
Hay muchas cosas que puedes hacer para ayudar a tu nuevo mejor amigo a instalarse en su nuevo hogar y reforzar su entrenamiento.
¿Sabías que puedes enseñar nuevos trucos a un perro adulto?
Los perros que tienen más de 7 años generalmente se consideran perros mayores (dependiendo de su raza), ¡pero todavía quedan muchos años felices con un perro mayor! Ya sea porque estés adoptándole de un albergue de animales o aceptando el perro de un amigo, darle un nuevo hogar a un perro mayor seguramente os beneficiará a ambos a medida que vuestra amistad crezca.
La esperanza de vida media de un perro es de unos 12 años (las razas más pequeñas tienden a vivir más que las razas grandes).
Los perros mayores ya tienen personalidades establecidas y (¡con suerte!) también deben entender algunas señales básicas, como sentarse o ir al baño fuera de casa.
Sin embargo, como están en un nuevo hogar con nuevas rutinas y expectativas diferentes, es importante que apoyes a tu perro con algo de entrenamiento.
Los perros pueden aprender a cualquier edad: ¡PUEDES enseñarle trucos nuevos a un perro mayor! Aunque la gente a menudo asocia el entrenamiento con cachorros y perros jóvenes, ¡el entrenamiento es importante a cualquier edad!
De hecho, los perros adultos a menudo pueden ser más fáciles de entrenar que los cachorros, ya que tienden a tener más autocontrol.
Entrenar a tu perro durante toda la vida también ayuda a mantenerlo mentalmente estimulado, mejora vuestra convivencia y puede fortalecer aún más vuestro vínculo.
10 Consejos para educar a un perro mayor
1. Establece una rutina y ayúdale a adaptarse
Enseñarle a tu perro cuándo esperar las comidas, las pausas para ir al baño, el ejercicio, el juego y la hora de acostarse es clave para que pueda comenzar a aprender su rutina y saber qué sucede durante el día.
El ejercicio regular es una parte importante de esta rutina; considera la edad de tu perro y la intensidad del ejercicio que necesita; pregunta siempre a tu veterinario si no está seguro. Las caminatas más frecuentes y más cortas pueden ser más adecuadas para un perro adulto y cuando haya buen tiempo, también considera llevar a tu perro a un lugar donde pueda nadar, ya que esta es una excelente forma de ejercicio de bajo impacto para un perro mayor.
2. Dale tiempo para adaptarse
Recuerda darle a tu perro un poco de espacio para que se acostumbre a su nuevo hogar. Es posible que quiera pasar un tiempo en un espacio tranquilo mientras se acostumbra a su nuevo entorno, así que asegúrate de que tenga un área o guarida para perros en tu casa donde pueda descansar sin ser molestado.
Crea una zona segura con una cómoda cama con mantas, coloca agua cerca y dale algunos juguetes con los que pueda jugar en su cama.
Si estás utilizando una jaula/transportín, considera colocar una manta sobre la parte superior de la jaula para que se sientan más seguros (les aísla de los ruidos y las luces). También vale la pena estar atento para ver si hay otra área de la casa en la que elija pasar el tiempo. Este puede ser su lugar preferido y un lugar ideal para su cama.
3. Ayuda a tu perro con ADAPTIL
Dondequiera que esté la guarida para tu perro, considera conectar un difusor ADAPTIL Calm Home para ayudarle a mantener la calma y adaptarse a su nuevo hogar. Esto también le ayudará a superar situaciones nuevas que puedan encontrar en casa, como quedarse solos, ruidos fuertes, visitas y miedos.
4. Enséñale a ir al baño
La mayoría de los perros adultos ya deberían haber aprendido a ir al baño. Sin embargo, cuando le des la bienvenida a una nueva rutina, dejale claro dónde quieres que vaya al baño, como lo harías con un cachorro.
Llévalo al aire libre con regularidad, por ejemplo, después de comer o beber, así como después de jugar o hacer ejercicio. Asegúrate de recompensarle tan pronto como hayan ido al baño afuera. Conoce cuáles son las señales de que les gustaría ir; estos podrían ser olfatear el suelo, o girar en círculo, o incluso moverse hacia la puerta, si esto sucede, llevale afuera, nuevamente elogiándole y recompensándole cuando actúe correctamente.
5. Mantén sesiones de entrenamiento con frecuencia
¡Programar sesiones de entrenamiento regulares con tu perro para pasar tiempo juntos puede fortalecer vuestro vínculo y ayudaros a entenderse mejor! Las sesiones de 10 minutos pueden funcionar bien y, como para cualquier perro, realiza el entrenamiento cuando tanto tú como tu perro estén tranquilos y cuando haya un mínimo de distracciones. Recuerda que puede requerir más repeticiones que con un perro más joven para aprender cosas nuevas, pero la buena noticia es que tu perro probablemente tendrá una mayor capacidad de atención que un cachorro, por lo que debes tener más tiempo para practicar antes de que se distraiga.
6. Considera la ayuda de profesionales
Considera llevar a tu perro a unas clases de entrenamiento para reforzar algunas señales básicas, repasar el caminar con correa suelta y ayudar a su perro a socializar con otros perros y personas en un entorno seguro. Si tu perro tiene dificultades con las señales básicas o tiene problemas de comportamiento, busca el consejo y el apoyo de un veterinario especialista en comportamiento; también puedes hablar con el centro de rescate o refugio del que adoptaste a tu perro, ya que pueden tener un miembro del personal que pueda ayudarte. Recuerda comunicarte con tu veterinario en caso de que haya un problema médico subyacente.
7. ¡Sé paciente!
Sé paciente con tu perro: tu nuevo amigo puede necesitar algunas sesiones antes de aprender algo nuevo, es importante ser comprensivo. La repetición es fundamental. Intenta entrenar en diferentes lugares una vez que hayan dominado el entrenamiento en casa.
Asegúrate de ser coherente con las reglas de la casa desde el principio: todos los miembros de tu hogar también deben cumplir estas reglas para que tu perro pueda comprender las expectativas, por ejemplo, si se les permite sentarse en el sofá o no. ¡Diferentes reglas con diferentes miembros de la familia confundirán a tu perro! Asegúrate de que todos usen las mismas palabras clave para que tu perro pueda entender fácilmente cómo deben actuar.
8. Nunca castigues a tu perro
El entrenamiento de refuerzo positivo es la mejor manera de entrenar a tu perro y ayudará a construir una relación más sólida entre vosotros. Usa chuches sabrosos, elogios, caricias o algo especial que sepas que le gusta a tu perro, para recompensarlo por su buen comportamiento. Esto le ayudará a aprender que ser buenos le dará resultados positivos. ¡Es posible que debas probar diferentes cosas para descubrir cuáles son sus recompensas favoritas! Es importante que nunca castigues a tu perro, ya que esto solo dañará vuestra relación con él y lo confundirá.
9. ¡Prueba actividades nuevas!
El tiempo de entrenamiento dedicado a aprender cosas nuevas puede ser divertido para ti y tu perro, así que prueba diferentes actividades de entrenamiento con ellos. Por ejemplo, ¡introduce un juego de olores para que usen la nariz! O bien, considera filmarte a ti mismo durante el entrenamiento; esta puede ser una excelente manera de ver cómo lo estás haciendo, y también de registrar vuestra creciente amistad y ver qué tan lejos ha llegado tu perro.
10. ¡Construye un vínculo con tu nuevo mejor amigo!
Establecer un vínculo con tu perro adulto adoptado es particularmente importante. Recuerda que es posible que los hayan dejado en un hogar de rescate o que hayan sido criados sin mucha atención por parte de sus dueños anteriores. Si es posible, averiguar sus antecedentes para poder entenderlo mejor; puede tener miedo a algo o puede tener problemas de confianza de los que deberás estar al tanto.
Dale la bienvenida a tu nuevo hogar y asegúrate de pasar mucho tiempo de calidad juntos con mucho tiempo de juego, relajación, aseo y ejercicio. Esto ayudará a fortalecer vuestro vínculo y ayudará a mejorar la convivencia en casa.
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