El entrenamiento es esencial para los perros, y el entorno de tu perro será una parte integral de ese proceso.

Recuerda, la experiencia de aprendizaje será diferente para cada perro. Su edad, su pasado y sus experiencias pueden influir en cómo responde al adiestramiento. En este caso, lo más importante para el éxito del adiestramiento de tu perro es contar con las condiciones adecuadas, asegurando que las sesiones fluyan sin problemas. En resumen, es recomendable elegir el entorno y el momento adecuados: aquel en el que tu perro esté relajado y en la mejor disposición para aprender.

Teniendo esto en cuenta, en este artículo analizaremos cómo crear un espacio adecuado para el adiestramiento de tu perro.

Las reglas del adiestramiento de perros

Para enseñar algo nuevo a tu perro, debes contar con su atención. Esta atención, y la intensidad de la misma, serán factores determinantes para un aprendizaje exitoso. A esto es lo que llamamos "enfoque". Tu perro debe estar conectado contigo; de lo contrario, será difícil (si no imposible) enseñarle algo.

Una vez establecida la conexión entre tú y tu perro, tienes la opción de elegir entre varias técnicas de adiestramiento y aprendizaje. Estas incluyen atraer, capturar o modelar:

• Atraer: atraer a tu perro consiste en conseguir que realice el movimiento o comportamiento que deseas guiándole con motivación. Por ejemplo, puedes utilizar una golosina en tu mano y moverla hacia arriba por encima de la cabeza de tu perro para animarlo a sentarse.
• Captura: la captura, por otro lado, consiste en reforzar un comportamiento que tu perro ofrece de manera natural. Por ejemplo, si tu perro se mete en tu cama sin que se lo pidas, puedes reforzarlo con una golosina y una señal de voz. Esto permite que tu perro asocie la señal, su acción y la recompensa, lo que aumenta la probabilidad de que lo haga en el futuro.
• Modelado: el modelado permite que tu perro aprenda con acciones o comportamientos por sí solos, pero con el tiempo, debes recompensar gradualmente las acciones que se acercan más a la deseada. Por ejemplo, si quieres que tu perro se acomode en una alfombra, puedes empezar recompensándolo cuando mire o se acerque a la alfombra, y al final del proceso premiarlo cuando esté en la alfombra.

¿Cuál es un ambiente adecuado para el adiestramiento de perros?

Otro aspecto clave del adiestramiento de perros, que será necesario dominar para tener éxito, es tener en cuenta el entorno en el que tu perro está aprendiendo.

Esta noción es esencial. Si no se respeta, literalmente puede impedir el progreso de un ejercicio, poniéndote a ti y a tu perro en jaque. Por lo tanto, es importante preparar el entorno y el espacio de entrenamiento de tu perro con antelación, y pensar en la mejor manera de organizarlo. Debes prestar atención a áreas como:

• Cualquier distracción presente
• Cualquier objeto necesario durante la sesión
• Los lugares donde se guardarán las golosinas u otras recompensas
• Y tu posición durante la sesión

Por ejemplo, si quieres enseñar a tu perro a ponerse de pie sobre su alfombra, será necesario tener en cuenta el tamaño de la alfombra. Al fin y al cabo, en una alfombra más pequeña será inicialmente más difícil de realizar para tu perro.

De la misma manera, si la habitación en la que estás trabajando con tu perro está llena de estímulos en relación con el nivel de adiestramiento de tu perro, puede que se frustre. O, alternativamente, tu perro no podrá concentrarse de forma ideal, o te ofrecerá una multitud de otros comportamientos que no deseas en ese momento.

Si encuentras que tu perro tiene dificultades para concentrarse y quieres ayudarlo a entrar en un estado de calma para el aprendizaje, también puedes considerar el uso de ThunderShirt. Este chaleco relajante aplica una presión suave y puede ser una herramienta efectiva para las sesiones de adiestramiento, ayudándolos a concentrarse y evitar distracciones fácilmente.

Los perros aprenden de diferentes maneras

Para entender cómo podemos crear el mejor espacio de adiestramiento para perros, es útil entender cómo aprenden. Pueden aprender de diversas formas, y aunque hay otros tipos de aprendizaje, los que se presentan aquí son los principales que se deben dominar:

• Aprendizaje social: en este caso, el perro realiza un comportamiento observando a otros que lo hacen. Por ejemplo, los cachorros aprenden comportamientos observando a su madre.
• Aprendizaje no asociativo: se trata de una forma sencilla de aprendizaje. Cuando se presenta un estímulo y el cerebro deja de prestarle atención después de exposiciones repetidas, se establece el proceso de habituación. En cambio, cuando un estímulo irrita al individuo, provocándole un estado de estrés, es más probable que se refiera como sensibilización. La sensibilización puede ocurrir incluso después de una sola experiencia.
• Aprendizaje por condicionamiento: Este es un método importante que utilizamos al educar a nuestros perros. El aprendizaje por condicionamiento se divide en dos categorías: condicionamiento clásico y condicionamiento operante. El condicionamiento clásico implica aprender asociando dos o más estímulos, lo que ocurre de forma involuntaria, ¡a veces incluso sin darnos cuenta! Por ejemplo, tu perro puede aprender rápidamente que cuando se levanta la correa, significa que es hora de salir a dar un paseo.

El condicionamiento operante, por otro lado, es cuando tu perro aprende a través de las consecuencias que suceden debido a su propio comportamiento. Un perro puede probar diferentes cosas y repetir aquellas que encuentra que tienen un resultado positivo. Un ejemplo de esto es cuando tu perro aprende que si escucha la palabra "Siéntate" y se sienta, recibe una recompensa. Estos dos tipos de condicionamiento pueden trabajar juntos.

Cuando enseñas a un perro un nuevo comportamiento, también se asocia una emoción con él, de ahí la importancia de un entorno positivo para el adiestramiento de tu perro.

La Regla de las 4D

La regla de las 4D ayuda a enseñar algo nuevo a tu perro siguiendo una progresión. Los cuatro elementos a considerar son:

• Distancia
• Duración
• Distracción
• Diversificación

Cuando tu perro está aprendiendo un nuevo comportamiento, debes hacer que el proceso inicial sea lo más fácil posible. Por lo tanto, no debes poner distancia entre tú y tu perro, debes trabajar en un lugar sin distracciones, durante períodos cortos, y siempre en el mismo lugar (para diversificar).

Después, cuando quieras aumentar el nivel de adiestramiento de tu perro, puedes aumentar la dificultad de una "D" a la vez. Asegúrate de hacerlo de manera positiva y cuando tu perro esté seguro en el nivel actual. Esta regla te permitirá progresar de manera positiva y sostenible.

¿Cuándo se debe interrumpir una sesión de adiestramiento?

Será necesario detener la sesión de adiestramiento de tu perro dentro de un período de tiempo razonable, de lo contrario, tu perro podría desmotivarse o incluso perder completamente el interés en su aprendizaje.

Para saber cuándo parar, es importante observar a tu perro y buscar signos de fatiga o desmotivación. La sesión debe terminar si ves que esto sucede, pero lo ideal es que detectes que debes parar antes de que notes que se desarrolla cualquier signo.

Un perro desmotivado suele intentar abandonar la sesión. Por ejemplo, puede irse a la cama, dejándote solo con las golosinas en las manos. Tu perro también puede hacer algo diferente, como olfatear el suelo; esto también puede significar que es hora de detener la sesión de adiestramiento de tu perro.

Es aconsejable hacer pausas durante las sesiones. Deja que tu perro descanse unos minutos y luego ofrécele retomar los ejercicios. O bien tu perro vuelve a acercarse a ti, o no vuelve y es hora de detener la sesión.

También puedes intentar limitarte a sesiones de 5 minutos. Pon un cronómetro, y cuando suene, termina tu adiestramiento. O lo que es lo mismo, lleva diez golosinas y una vez que tu bolsa esté vacía, es hora de detenerse.

El objetivo aquí es encontrar la forma en que a tu perro le gusta trabajar, proporcionarle un entorno que no sea muy estimulante al principio y aceptar que tu perro necesitará períodos de descanso.

¿Qué hacer si el adiestramiento no funciona?

Si, a pesar de tus mejores esfuerzos, el adiestramiento de tu perro no funciona, puede ser necesario hacerte algunas preguntas. Es importante saber que debe haber una razón por la que tu perro no es capaz de realizar la acción o el comportamiento que estás buscando. Sabiendo esto, tendrás una idea del ajuste necesario a realizar.

Aquí hay algunos consejos para ayudarte a entender por qué las sesiones de adiestramiento de tu perro no están funcionando:

1. Tu perro está cansado física y/o mentalmente.
2. Tu progreso no está lo suficientemente adaptado a tu perro. Tal vez quieras ir demasiado rápido, pidiendo demasiado al principio y necesites descomponer la acción en pasos más pequeños.
3. No tienes suficiente energía para tu perro y/o él tiene demasiado energía para concentrarse en ti y en tu solicitud.
4. Necesitas trabajar más en lograr que se concentre en ti y mejorar la relación entre ambos.

Si fallas, toma un descanso, piensa en la causa, disminuye el nivel e incrementa la motivación de tu perro. También puedes cambiar las recompensas utilizadas, como el tipo de golosina, y considerar si estás utilizando un entorno adecuado para el espacio de adiestramiento de tu perro.

Finalmente, no dudes en recurrir a un adiestrador canino. Ellos pueden ayudarte con el adiestramiento de tu perro, comenzando con una base correcta de manera personalizada para tu perro.

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