Esta semana hemos decidido explorar una de las preguntas más comunes que a los padres de perros les encanta realizar: ¿qué tan bien pueden los perros percibir nuestros estados de ánimo? La respuesta es fascinante. El vínculo entre perros y humanos es profundo y complejo en la misma medida. Por eso estamos ofreciendo nuestros conocimientos sobre cómo los perros interpretan nuestros estados emocionales, además de compartir algunos consejos sobre cómo podemos fortalecer, juntos, nuestro vínculo emocional.

La Sensibilidad de los perros a las emociones humanas

Cualquier persona que haya pasado un período prolongado con su mascota sabrá que los perros son increíblemente hábiles para detectar e interpretar los estados de ánimo humanos. Lo hacen utilizando una variedad de sentidos que incluyen la vista, el oído e incluso el olfato, y pueden percibir seis emociones humanas básicas: felicidad, tristeza, miedo, enojo, sorpresa y disgusto.

Sentido Visual

Una de las formas en que los perros pueden interpretar las emociones humanas es observando nuestras expresiones faciales. De hecho, están tan sintonizados con nuestros rostros que pueden distinguir entre una cara feliz y una enojada solo con mirar una foto. Del mismo modo, también pueden detectar cambios en nuestro lenguaje corporal, como cómo nos movemos o nuestra postura.

Sentido del olfato

Quizás la forma más notable en que los perros interpretan nuestras emociones es a través de su increíble sentido del olfato. El olfato de un perro es tan agudo que pueden detectar diferencias químicas dependiendo del estado de ánimo que esté experimentando un humano. Por ejemplo, hay estudios que han detectado que, los perros expuestos a muestras de sudor de personas que vieron películas de terror, mostraron niveles de estrés más altos que cuando fueron expuestos a muestras de personas que vieron películas felices.

Señales auditivas

Se cree que esta sensibilidad canina también es auditiva y olfativa. Al fin y al cabo, la forma en que hablamos a nuestros perros también importa. Los perros procesan las emociones de nuestra voz de forma similar a los humanos: los tonos positivos se procesan en el lado izquierdo del cerebro y los negativos en el derecho. Esto demuestra que los perros tienen una sofisticada comprensión de las señales emocionales vocales, lo que pone de relieve la profundidad del vínculo canino.

Comprender la conexión entre perros y humanos

Curiosamente, la sensibilidad de un perro también se extiende a su percepción respecto a nuestra atención. Habrás observado que los perros se vuelven más expresivos cuando saben que les estamos observando. Una de las formas en que los perros muestran este lenguaje emocional es imitando las emociones que perciben en nosotros.

Pruébalo con tu amigo de cuatro patas: si tú sonríes, ¿el lenguaje corporal de tu perro también se alegra? Ahora pon una cara triste o emite un sonido: ¿el comportamiento de tu perro cambia?

Los perros de terapia son un magnífico ejemplo de cómo este vínculo canino puede ser beneficioso tanto para los humanos como para los perros. Los perros de terapia responden a las emociones que presencian en los humanos, ofreciendo apoyo y consuelo a personas en escuelas, hospitales y residencias. Por supuesto, es importante no sólo tener en cuenta cómo los perros pueden beneficiar a los humanos en estas situaciones, sino también pensar en el bienestar emocional de los propios perros. Nunca debemos obligarles a vivir situaciones en las que se sientan incómodos. Antes de recurrir a sus capacidades terapéuticas, hay que asegurarse de que se sienten a gusto con las personas y en distintos entornos.

Y recuerda, tu perro puede captar cuándo te sientes estresado y además puede servirte de consuelo, pero nosotros, los humanos, debemos ser capaces de ofrecer el mismo nivel de apoyo a nuestros perros. Si entendemos el lenguaje corporal de un perro, podemos detectar cuándo está estresado y hacer cambios para que se sienta más tranquilo. Por ejemplo, si te preocupa que tu perro se sienta estresado o incómodo, prueba a utilizar un difusor ADAPTIL Calm Difusor. Basta con enchufar este difusor de feromonas a una toma de corriente de tu casa para obtener hasta 30 días de calma.

Cómo reforzar el vínculo humano-canino

Si te preguntas cómo puedes potenciar la conexión entre perros y humanos, hay una serie de actividades que puedes aprovechar. Las actividades compartidas, como el adiestramiento, el ejercicio y el juego, pueden ser una forma muy eficaz de vivir, juntos, una experiencia significativa. No sólo proporcionan estimulación mental y ejercicio físico a tu perro, sino que también ofrecen oportunidades para generar interacciones positivas, mejorando la conexión emocional.

No olvides que la compañía de un perro conlleva un gran número de ventajas. Entre ellas, están:

• Amor incondicional: el afecto de un perro puede ser enormemente significante, aumentando nuestra felicidad y optimismo general. El contacto visual con un perro puede incluso aumentar los niveles de oxitocina, la hormona del amor asociada a la confianza y el afecto.
• Reducción de la ansiedad: el simple hecho de estar con un perro, hablarle o acariciarlo, puede tener un efecto calmante, ayudando a calmar la ansiedad.
• Estructura y rutina: una rutina diaria compartida puede crear un sentido de propósito y logro tanto para los humanos como para los perros, ayudando a nuestro bienestar emocional compartido.
• Oportunidades sociales: tener un perro puede fomentar todo tipo de interacciones sociales, desde conocer a otros paseadores de perros hasta ir a la peluquería, lo que ayuda a mantener una red social saludable.
• Salud física y emocional: los paseos regulares y las actividades al aire libre con un perro no solo favorecen la salud física, sino que también proporcionan un estímulo emocional.

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