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A los perros nos gusta lamer, es un comportamiento natural para nosotros. Y a veces, como parte de nuestro aseo personal, lamemos nuestras patas para eliminar la suciedad y mantenerlas limpias y agradables. Podemos hacerlo después de una comida, antes de acomodarme para una siesta o después de entrar a casa... Después de todo, ¡odiaríamos tener que ensuciar tus alfombras!
Pero a veces hay otras razones por las que nos lamemos las patas. Es posible que tengamos almohadillas doloridas, alergias o incluso que estemos estresados. Si notas que me estoy lamiendo las patas más de lo habitual, probablemente sea una buena idea que el veterinario me revise para asegurarse de que no haya una causa subyacente.
Razones para lamerse las patas
Además de ser nuestro hábito de aseo personal más común, lamerme demasiado y el aseo excesivo a veces pueden ser nuestra forma de decirte que algo anda mal.
- Alergias: al igual que ustedes los humanos, los cachorros podemos tener ciertas alergias que hacen que nos pique la piel, ¡incluidas nuestras patas! Ya sea nuestra comida, los ácaros del polvo o algo con lo que nuestras patas hayan entrado en contacto durante nuestra caminata diaria (como el polen), podemos estar lamiendo o mordisqueando nuestras patas debido a una reacción alérgica.
- Parásitos: si bien existen tratamientos preventivos para ayudar a reducir el riesgo, a veces podemos tener ácaros, garrapatas o pulgas, especialmente si vivimos cerca del campo o vamos al parque durante nuestras caminatas diarias. Estos parásitos pueden causarnos picores en general y, a veces, pueden quedarse en nuestras patas, entre los dedos, donde la piel es más finita.
- Dolor: si notas que nos lamemos una pata en particular más que las otras, es posible que me duela la articulación o la piel. Ya sea una picadura de insecto, una astilla o una uña dañada, si no identificas que me pasa, lo mejor es que el veterinario me realice una buena revisión para identificar la causa del malestar. ¡Y así me das premios y chuches deliciosas al portarme bien durante la visita al veterinario!
- Comportamiento: si no existen causas físicas que justifiquen el lamido y el cuidado excesivo de nuestras patas, puede ser una señal de que nos estamos sintiendo estresados o aburridos. Lamer puede ser relajante y reconfortante para nosotros, por lo que puede ser solo un hábito que hemos desarrollado para pasar el tiempo o podría ser una forma de consolarnos cuando nos sentimos ansiosos.
¿Cómo puedo saber si mi perro se lame demasiado las patas?
¡A veces los perros podemos dejarnos llevar un poco! Lamernos demasiado las patas puede causar dolor e incluso dañar nuestra piel. Probablemente sea mejor estar atento y asegurarse de que no nos estamos lastimando.
Mi humano siempre se asegura de revisar mis patas con regularidad. No me gustaba mucho al principio, pero con un poco de entrenamiento, y muchos premios, me he acostumbrado. Revisan mis patas y con mucho cuidado, miran también entre los dedos, especialmente después de una caminata, para asegurarse de que no haya espigas, astillas o cualquier otra cosa incómoda que pueda hacerme lamer y mordisquear mis patas.
También comprueban si hay enrojecimientos, heridas, costras, uñas rotas o cualquier hinchazón si notan que me lamo las patas más de lo habitual.
Soy un cachorro muy curioso y, a veces, cuando estoy explorando, paso en cosas que me lastiman las almohadillas.
Siempre se aseguran de contactar al veterinario si ven algo extraño.
¿Qué hacer si tu perro se lame demasiado las patas?
Si notas que nos estamos lamiendo las patas más de lo habitual, esto es lo que puedes hacer:
- Consulta con un veterinario: a veces camino sobre algo que no debería, si estás preocupado por si me he lastimado la pata o si parece que me duele o que la tengo inflamada, lo mejor es que el veterinario me revise y nos aseguremos que todo está
- Fíjate en si es un comportamiento que se repite. A veces, los perros podemos tener reacciones alérgicas, así que si notas que siempre me lamo o muerdo las patas después de un baño, por ejemplo, podría significar que algo lo está desencadenando. Tampoco ayuda si me siento estresado.
- A los cachorros nos gusta estar ocupados, así que a veces todo lo que se necesita es un poco de estimulación mental. Tiendo a lamer o masticar mis patas por aburrimiento, pero luego mi humano me da mi juguete favorito para entretenerme y me ayuda a dejar de hacerlo.
- Si lamer es un problema de comportamiento, puedes ayudar a reducir la fuente de ansiedad. Por ejemplo, a veces podemos sentirnos ansiosos cuando nos quedamos solos en casa, en ese caso, es posible que necesitemos un poco de entrenamiento adicional.
- Solía lamerme las patas cuando estaba ansioso, ¡pero mi humano usó ADAPTIL para ayudarme a sentirme más relajado! El difusor ADAPTIL Calm Home me ayuda a sentirme más cómodo en situaciones desafiantes y me tranquiliza para que ya no tenga que lamerme demasiado las patas, ¡es genial! Mi humano conecta el difusor a la pared cerca de mi cama y se asegura de que siempre funcione bien usando un Recambio ADAPTIL Calm una vez al mes.
- ¡A veces no nos damos cuenta de que lo estamos haciendo! Lamernos las patas a menudo puede convertirse en un hábito, por lo que es posible que debas buscar ayuda profesional de un veterinario especialista en comportamiento para ayudar a prevenir este hábito.
- Lo más importante: ¡no nos regañes por lamernos las patas! Esto solo nos pondrá más nerviosos y podría agravar el problema.
Lamerse es completamente natural para nosotros los perros, pero si te preocupa que nos estemos lamiendo demasiado, ¡siempre es mejor que un veterinario nos revise para aliviar tus preocupaciones y asegurarte de que estamos en las mejores condiciones!
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